domingo, 5 de julio de 2015

Messi + Missing = Messing

Messi is Missing = Messing


Messi + Missing = Messing - Argentina - AFA - Chile Campeón Copa de América - el troblogdita - ÁlvaroGP
Messi + Missing = Messing
Argentina Subcampeona de la Copa de América derrotada en penaltis por Chile
Álvaro García - ÁlvaroGP - el troblogdita

Sigo sosteniendo mi teoría de que Messi, el gran Messi que todos hemos visto jugar en el Fútbol Club Barcelona no es ni la mitad de si mismo cuando juega con Agentina.

Y sigo sosteniendo que esto se debe a que el Barça lo blindó en su momento para explotar sus (muchas) cualidades poniendo a la mejor generación de futbolistas españoles a su merced. Cuando Los Xavi (retirado), Iniesta, Busquets y compañía (que a diferencia de Messi, sí son Campeones del Mundo), se plantan en el terreno de juego, pocos (lamentablemente pues os lo dice un Madridista) son capaces de quitarles el balón. Ellos triangulan, juegan, pasan, marean y propician el lucimiento personal del argentino. Y esto es porque Xavi e Iniesta, para mi gusto, han sido los dos mejores futbolistas que ha dado el fútbol.

Por él han pasado por carros y carretas.

Han caído entrenadores, han salido futbolistas, Hacienda ha hecho la vista gorda a sus regates económicos y la Justicia ha redoblado su ceguera.

Pero cuando Messi salta el charco y las rayas de su camiseta se aclaran de blaugrana a albiceleste es otra historia...


Messi + Missing = Messing


En Argentina tiene que ser uno más. Ya no tiene su Guardia de Corps y si la tuviera, no son lo mismo que la todopoderosa columna vertebral de la Selección Española de Fútbol (sus compis del Barça). Son descartes, por lo general del Real Madrid (Di María, Higuaín...) que siendo buenos (el primero, aunque se fue por pesetero, el segundo no tanto) han salido por la puerta de atrás del único Club laureado como el Mejor del Siglo XX. El Real Madrid.

Por eso no me extrañó ver cómo Alemania ganó a Argentina en el Mundial de Brasil ni me ha extrañado ver cómo Chile hizo lo propio en la Copa de América ayer. Lo que sí me sorprendió fue ver cómo Messi se diluyó en ambos encuentros, dejando la autoridad a Mascherano y cómo Argentina, luchadora frente a los teutones, lo intentó hasta el final en Chile pero hizo una recta final de partido que más bien parecía un boxeador buscando la toalla para tirarla al suelo.

Todo esto, según mi modesto entender, por apostar todo a su jugador franquicia. El mismo que se borra una y otra vez cuando no juega en su FCBarcelona.

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